Saïd Ramos es el futuro, o tal vez ya es el presente de la danza clásica de nuestro país. La pasada primavera se convirtió en el ganador de la primera edición del programa “Prodigios” de TVE, recibiendo elogios de grandes como Nacho Duato, que ya le ha abierto las puertas de su compañía. Vecino del barrio de la Mina, el amor por este arte le viene de sus padres, Olga Ponce y Moisés Ramos, bailarines de danza española. Con tan solo 16 años tiene muy claro que la falta de apoyo a su disciplina, o muchas otras, en nuestro país es culpa de los políticos. Actuará con su escuela, el Centre de Dansa de Catalunya (CDC), el sábado 7 de septiembre en la plaça de la Vila.
Pregunta. ¿Cómo crees que recibirá el público tu actuación?
Respuesta. Creo que les puede gustar. Es una manera de fomentar la danza. Tal vez algún niño que me vea bailar les diga a sus padres que le gusta y que quiere aprender. A lo mejor descubren su futura carrera.
P. ¿Cómo entras en la danza clásica? Tus padres son bailarines pero de danza española.
R. Empecé con ellos haciendo clásico español, contemporáneo. A los 11 o 12 años ya quería dedicarme más al clásico y me llevaron al Centre de Dansa de Catalunya, en L’Hospitalet, donde estoy ahora. (Los directores de la escuela, donde Saïd está becado desde que entró a estudiar en ella, son Roser Muñoz y Joan Boix. Dos de sus referentes, además de sus padres).
P. ¿Por qué te pasaste a la clásica?
R. No lo sé. Es una pregunta muy complicada. Bailo de todo, también danza española, pero escogí la clásica porque lo sentía así.
P. ¿Qué sientes al bailar? ¿Quieres expresar algo?
R. No sé, cuando escuchas la música… También tienes que interpretar un papel, porque dentro de lo que estás bailando hay una historia. El bailarín de danza no deja de tener también una parte de actor. Intentas guiarte por el personaje y también por lo que tú sientes.
P. ¿Cuál va a ser tu futuro en el estudio de la danza? ¿Continuarás en el CDC?
R. A mí me gustaría audicionar ya a los 18 años, a ver si puedo entrar en una compañía. Ahora tengo 16, todavía me quedan 2 años en el CDC. Nacho Duato me escribió y me dijo que tenía las puertas abiertas de su compañía en San Petersburgo cuando me sintiera preparado.
P. Cuando Nacho Dueto te piropea tanto y te abre las puertas de su compañía, ¿te asusta o te da alas para continuar?
R. Te da mucha esperanza e ilusión pensar que le he gustado al gran Nacho Duato, que no es una persona cualquiera. También me está diciendo que mi trabajo va por buen camino para llegar lejos.
P. Lo malo es que tienes que salir de España porque aquí es imposible.
R. Aquí no hay apoyo cultural ni político. Las artes en España no las tienen presentes, no están valoradas.
P. ¿Por qué piensas que el público aquí no está educado como en otros países como Francia, por ejemplo?
R. La sociedad actual se guía por el líder- El líder en este caso es el Gobierno. Si el Gobierno diese más posibilidades a la danza, creo que a la gente le gustaría e iría a verla. Pero como no han tenido esa oportunidad no saben lo que es la danza y no la valoran.
En otros países hay compañías en cada rincón. Y es porque el gobierno del país apoya esa cultura.
P. La pena es que no se valora la danza ni el esfuerzo que hay detrás de ese espectáculo.
R. Claro, porque no se tiene conocimiento de este arte. Por ejemplo, en Rusia el mejor trabajo que puedes tener es ser bailarín, tanto si eres chico como si eres chica. Y de bien pequeños ya están bailando. Es una cultura diferente.
P. Cuando te presentaste a “Prodigios” lo hiciste también para dar más visibilidad a la danza masculina. Porque aquí tenemos aún muchos prejuicios de que la danza es para niñas y si la baila un niño es que es afeminado.
R. Sí. A mí me gustó mucho “Prodigios” porque por fin se veía en televisión un programa que fomentaba el arte, no tanta chorrada de ir disfrazado y hacer un show que no vale. Además, en el apartado de danza había más chicos que chicas. Es un programa que ha dado mucha visibilidad a la danza.
